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Lista de candidatos sometidos a examen:
1) consonánticos (*)
(*) Términos presentes en el nuestro glosario de lingüística

1) Candidate: consonánticos


Is in goldstandard

1
paper CH_corpusLogostxt125 - : A continuación, se presenta la descripción articulatoria de las realizaciones alofónicas de los fonemas consonánticos, los cuales son: /p, t, t̟, k, v, ɻ, ʃ, s, ð, ʈʂ, m, n, ɲ, ŋ, l, ʎ/ .

2
paper CH_corpusLogostxt90 - : El supuesto fundamental que subyace a estos procedimientos es que la medición de la duración, pero principalmente de la variabilidad de la duración (tanto en términos absolutos como relativos) de los segmentos vocálicos y consonánticos, es un indicador objetivo y cuantificable de la mantención de la integridad fonológica de la sílaba en el nivel fonético . En este caso, se asume que la mantención de la integridad de la sílaba, por lo tanto la uniformidad en sus duraciones, es una consecuencia de un ritmo de tipo silábico y lo contrario es una consecuencia de un ritmo acentual

3
paper CH_corpusRLAtxt116 - : Goldstein y Cintrón (2001) describieron la fonología en tres niños de dos años, hablantes nativos de español de Puerto Rico. En relación a los GCs los autores señalan que la mayor tasa de elisión se evidenció en estas estructuras, ya que de las 82 oportunidades de producir GCs, 69 (84.1%) fueron producciones no correctas. De estos 69 GCs incorrectos, 64 (93%) fueron reducidos (ej. /plato/ →['pa.to]) y 5 (7%) fueron omitidos por completo (ej. /plato/→['a.to]. En sus resultados, plantea además la existencia de tres patrones distintos en la reducción de los grupos consonánticos: 1) en 59 de 64 reducciones es eliminado el segundo elemento del grupo (ej . /plaja/→['pa.ja]); 2) hubo cinco casos de asimilación (ej. /tɾen/→[nen]) y 3) hubo más del doble de reducciones en los GCs compuestos por obstruyente más [ɾ] (44 de 64=69%) que en los de obstruyente más [l] (20 de 64=31%).

4
paper CH_corpusRLAtxt116 - : El principio de secuencia de sonancia (sonority sequencing principle: SSP) impone que los constituyentes de la sílaba aumenten gradualmente su sonancia^[26]2 hacia el núcleo y la disminuyan hacia las periferias de éste. Acorde con este principio, los elementos individuales dentro de un ataque complejo deben diferir en sonancia, es decir, el primer elemento debe ser menos sonante que el segundo. La secuencia de sonancia también determina la complejidad individual de un grupo consonán-tico: los grupos consonánticos cuyos elementos están relativamente próximos en la escala de sonancia son más marcados, es decir, menos comunes universalmente . Durante el proceso de adquisición fonológica, es común un tipo particular de reducción de los GCs relacionado con el patrón de sonancia (Chin, 1996; Ohala, 1999; Barlow, 2005; Pater y Barlow, 2003; Gierut, 1999) en el cual los niños evidencian la tendencia a reducirlos al segmento menos sonante independientemente de la lengua de que se trate.

5
paper CH_corpusRLAtxt116 - : En el estadio 3 la mantención de dos elementos consonánticos en el output se manifiesta de dos formas: en algunos casos se aprecia el paso de los sujetos por las tres etapas, es decir: C[1]→C[1]C[g]→C[1]C[2] mientras que en otros sólo C[1/2] →C[1]C[2] . Lo anterior se ejemplifica en las emisiones de Agustina en (11a) y (11b), respectivamente. En el caso de (11a) se muestra cómo la niña en primer lugar mantiene el primer elemento en el output (['pa.ta.no] por plátano), posteriormente en el mismo AC, es decir, /pl/ evidencia el surgimiento de una semiconsonante en la segunda posición del AC ([kum.'pja.no].

6
paper CH_corpusRLAtxt116 - : Uno de los aspectos que se ha considerado entre los más interesantes en los estudios de adquisición de los grupos consonánticos es la relación entre el comportamiento articulatorio de las consonantes en posición aislada y dentro de grupos consonánticos . En este aspecto la respuesta es relativa y dependerá más bien del tipo de consonante de que se trate. En esta investigación, por ejemplo, se concluye que la asimetría que existe entre los grupos /C+1/ frente a los grupos /C+ɾ/ en la mantención del primer elemento se debe a la dificultad articulatoria que presenta la vibrante simple para los pequeños hispanohablantes (Bosch, 2004; Serra, 1984; González Valenzuela, 1989; Miras Martínez, 1991; Vivar y León, 2009).

7
paper CH_corpusRLAtxt2 - : Tanto en español como en inglés los procesos fonológicos resultantes de las agrupaciones de segmentos en sílaba obedecen a principios universales de la lengua. Chela-Flores, G. (1983, 1987, 1995) propone, a través de su modelo polisistémico natural, dos tipos de comportamiento de los sistemas consonánticos en los márgenes sílabicos: (i ) en el sistema prenuclear se detectan tendencias claras de refuerzo, vale decir incremento de complejidad articulatoria o por lo menos resistencia a procesos erosivos y (ii) en el sistema posnuclear las tendencias son al debilitamiento, equivalente a la simplificación articulatoria o acercamiento a la naturaleza vocálica del núcleo. De esta forma se explica el cambio que afecta a las consonantes posnucleares en ambos idiomas. El sonido /t/ en el inglés, por ejemplo, en posición prenuclear es reforzado por procesos típicos de ese sistema, tal como la aspiración, por ejemplo, time [t^haI m], attain [ [cuadrado.jpg] 't^heI n], etc. En posición posnuclear, es

8
paper CH_corpusRLAtxt42 - : Los fonemas consonánticos del mapuche hablado en Tirúa son los siguientes: /p, [art02_f09 .jpg] . La descripción articulatoria de las realizaciones alofónicas de cada uno es la que se presenta a continuación:

9
paper CH_corpusRLAtxt42 - : Los siguientes cuadros resumen los fonos y fonemas vocálicos y consonánticos del mapudungun hablado en Tirúa:

10
paper CL_LiteraturayLingüísticatxt367 - : Desde la perspectiva de la optimidad, del mismo modo que tenemos una restricción *COMPLEXONS, que se justifica por la existencia de lenguas que no toleran grupos consonánticos en el ataque, también tenemos una restricción en contra de los núcleos silábicos complejos (27), justificable por la existencia de lenguas que no toleran diptongos:

11
paper CL_LiteraturayLingüísticatxt367 - : El estadio 3 se caracteriza por el surgimiento del segundo elemento del AC; sin embargo, los pequeños consiguen las formas correctas con distintos ritmos y recorriendo distintas rutas, según el tipo de AC de que se trate y también según las características particulares de su sistema fonológico. La mantención de dos elementos consonánticos en el output se manifiesta de dos formas: en algunos casos se aprecia el paso de los sujetos por las tres etapas C[1]--> C[1]C[G] --> C[1]C[2], mientras que en otros casos se evidencia un paso desde C[1]/[2]--> C[1]C[2]:

12
paper CL_LiteraturayLingüísticatxt367 - : estricciones de fidelidad, IDENT(LAB), IDENT(COR) permiten determinar cuál es más importante en la jerarquía de restricciones durante un período determinado de tiempo; en consecuencia, gracias a la infraccionabilidad de las restricciones, en principio, es posible explicar las diferentes variedades de armonía consonántica mediante la interacción de las dos ya mencionadas restricciones. Uno de los aspectos que se ha considerado entre de los más interesantes en los estudios de adquisición de los grupos consonánticos es la relación entre el comportamiento articulatorio de las consonantes en posición aislada y dentro de grupos consonánticos . En este aspecto la respuesta es relativa y dependerá más bien del tipo de consonante de que se trate. En este trabajo, por ejemplo, se concluye que la asimetría que existe entre los grupos /C+l/ frente a los grupos / C+ [art13-x.jpg] / en la mantención del primer elemento se debe a ladificultad articulatoria que presenta la vibrante simple para los

13
paper CL_LiteraturayLingüísticatxt544 - : La evaluación se aplicó de manera individual procurando un ambiente acústicamente adecuado y sin factores distractores. La prueba se presentó como un juego en el cual se les solicitó a los informantes que expresen verbalmente lo que veían en cada lámina. Sus respuestas fueron inducidas por las entrevistadoras con preguntas del tipo: ¿qué es eso?, ¿qué hace?, ¿de qué color es?, etc. y cada entrevista fue grabada en un equipo TASCAM D-40. En relación con el análisis de los datos, esta investigación se basó en una perspectiva articulatoria que permite identificar y describir cómo se van insertando fonemas y grupos consonánticos en el sistema fonológico infantil, por lo que la unidad de análisis fue el elemento lingüístico, es decir, la emisión de una consonante o grupo consonántico . Con respecto a la metodología en particular, con la finalidad de elaborar patrones evolutivos, se contabilizó el número de emisiones correctas para cada fonema y se obtuvo el promedio de articulación nor

14
paper CL_LiteraturayLingüísticatxt385 - : En el mapuche hablado en Lonquimay, los fonemas consonánticos son: [19 .jpg] La descripción articulatoria de las realizaciones alofónicas de cada uno de ellos se presenta a continuación.

15
paper CO_CuadernosdeLingüísticaHispánicatxt83 - : Según la descripción de ^[34]Mansen y Captain (2000), el sistema fonológico del wayúu-naiki consta de 22 fonemas que han sido representados por 22 letras. En el sistema propuesto, buscaron equivalencias con la lengua castellana. Consta de una vocal más que en castellano, la ü (pronunciada entre la u y la i), como en: anasü 'bueno', aürütsü 'flaca'. Tienen dos fonemas consonánticos propios: la sh pronunciada como la sh inglesa, en palabras como: shupe 'jején', shiol o jo 'sombra' ; la w una consonante, como la u castellana antes de otra vocal como en hueso (muchas veces pronunciada como queso), en palabras como waya 'nosotros', wopü 'camino'. En cuanto al aspecto morfo-sintáctico, a esta lengua la clasifican como aglutinante.

16
paper CO_FormayFuncióntxt196 - : En este apartado observaremos aspectos de la fonología de la lengua; por ejemplo, que esta tiene un total de veintiún fonemas consonánticos: ocho oclusivos (sordos y sonoros ), cuatro fricativos (sordos), tres nasales, dos líquidos y cuatro labializados. Veremos fenómenos morfofonológicos como la asimilación, disimilación y elisión. Igualmente, miraremos que la lengua sáliba tiene cuatro clases de palabras: nominales, determinantes del nominal (demostrativos, posesivos, indefinidos, cuantificadores y adjetivos), verbos y adverbios. Además, veremos la conformación del sintagma nominal y el sintagma verbal. En cuanto a la predicación, observaremos que esta lengua tiene dos tipos: nominal y verbal. Y, en cuanto a las oraciones, se observa que pueden ser: afirmativas, negativas e interrogativas.

17
paper CO_FormayFuncióntxt243 - : Para validar estas nociones y proveer un correlato fonético para el ritmo, ^[33]Ramus, Nespor y Mehler (1999) propusieron calcularlo utilizando la desviación estándar de la duración de los intervalos consonánticos y los intervalos vocálicos (también conocidos como Deltas: Δc y Δv, respectivamente ). Además, se observó el porcentaje de vocales (%v), es decir, la proporción de vocales encontradas en el fragmento de habla analizada.

18
paper CO_FormayFuncióntxt280 - : Asimismo, al igual que otros segmentos consonánticos, la glotal oclusiva participa de una serie de procesos fonológicos en estas lenguas: por ejemplo, epéntesis en posición de ataque, como lo muestra el ejemplo en 6 (y después de un fono sonoro ante pausa )^[120]^5; elisión en procesos de sufijación, como en los ejemplos en 7 (un fenómeno bastante extendido en las cuatro lenguas); laringealización de vocales, de los ejemplos en 8; armonía vocálica regresiva, como en los ejemplos de 9, y disimilación, como en 10, entre otros. Esto favorece la hipótesis de que la glotal oclusiva es un segmento consonántico independiente y de que, lejos de tener un comportamiento defectivo, muestra un comportamiento regular y predecible en los procesos fonológicos en los que participa. Los procesos de epéntesis y elisión afectan a la glotal, mientras que en los de laringealización de vocales, armonía vocálica regresiva y disimilación es la glotal oclusiva la que afecta a segmentos del entorno.

19
paper CO_FormayFuncióntxt280 - : Finalmente, ^[145]Claesson (1994) analiza la serie entera de «eyectivas» en el wichí/weenhayek de la zona de Villamontes, en el Departamento de Tarija (Estado Plurinacional de Bolivia), como grupos consonánticos. El autor argumenta que este modo de analizar las consonantes «modificadas» por la glotal es ventajoso para la descripción y para la escritura de la lengua, porque reduce la cantidad de fonemas de manera drástica y la representación fonológica se corresponde totalmente con la estructura morfológica (^[146]Claesson, 1994). Al mismo tiempo, alterna el término cluster (grupo consonántico) con complex sounds (sonidos complejos), por lo que no termina de verse con claridad si el criterio para definir las consonantes eyectivas como grupos consonánticos es funcional en términos de simplificación descriptiva y para la alfabetización y difusión de la lengua, o es un criterio fonológico . De hecho, el autor afirma que estos sonidos complejos se reducen cuando ocurren en posición de coda y [h

20
paper CO_FormayFuncióntxt280 - : Grupos consonánticos o sonidos complejos: CL

21
paper CO_FormayFuncióntxt280 - : Grupos consonánticos o sonidos complejos: CL

22
paper CO_FormayFuncióntxt141 - : En cuanto a su estructura fonológica —subcampo de este trabajo descriptivo—, el rromanés bolochók de Cúcuta cuenta con un inventario fonológico de cinco fonemas vocálicos y 23 fonemas consonánticos, como se ilustra en los dos siguientes cuadros:

23
paper CO_FormayFuncióntxt251 - : rado de complejidad de un sistema consonántico ^[42](Lang & Ohala, 1996). Desde esta perspectiva, los sistemas vocálicos y consonánticos resultan de una optimización de las distinciones acústicas y articulatorias que maximizan la distinción acústica y economizan los movimientos articulatorios: se prefieren movimientos articulatorios menos complejos, aunque sean menos distintivos acústicamente . Esto explicaría, por ejemplo, que el sistema vocálico más frecuente sea /i, e, a, o, u/ y no /i, e͂, a̤, o, u^ʕ/; y si bien este último tipo de sistema es acústicamente distintivo, es articulatoriamente más complejo (Maddieson, 1984, en De Boer, 2001).

24
paper CO_FormayFuncióntxt251 - : Dejando de lado los segmentos elaborados y complejos, ^[47]Maddieson (2013a) establece cinco categorías de sistemas consonánticos, a partir del número de consonantes (c) que se oponen fonológicamente: 1) inventario pequeño (P): 6-14 c ; 2) inventario mo-deradamente pequeño (MP): 15-18 c; 3) inventario promedio (Pr): 19-25 c; 4) inventario moderadamente amplio (MA): 26-33 c, y 5) inventario amplio (A): 34 o más c. Según Maddieson, el inventario consonántico más frecuente en las lenguas del mundo (LM) contiene entre 19 y 25 c (Pr). Esto se ilustra en la [48]Figura 2.

25
paper CO_FormayFuncióntxt251 - : De las 38 lenguas seleccionadas para este estudio, 35 presentan inventarios consonánticos con 10-18 c y se distribuyen según las familias de la manera siguiente: arawak (3 ), chapakura (3), macro-ge (2), pano (2), takana (2), tupí (10), nambikwara (4), más las once lenguas aisladas. Las tres (7.9 %) lenguas restantes (suruí-paitér, cavineña y takana) presentan inventarios más amplios (Pr) e incorporan articulaciones elaboradas. El suruí-paitér (19) despliega un segmento lateral fricativo sordo interdental [91] (Bontkes & ^[59]Bontkes, 2009, p. 6)^[60]^6 y una aproximante /r/, cuya pronunciación varía entre un flap y una aproximante retrofleja ^[61](Van der Meer, 1982). El cavineña (20) y el takana (19) presentan segmentos líquidos (/I/, /Á/) y retroflejos (/ɖ/, /ʂ/, /tʂ/), respectivamente, ausentes de las otras lenguas de la familia takana: ese ejja y araona. Sugestivamente, estas lenguas se encuentran próximas a la región AN, cuyas lenguas hacen uso fonológico del subsistema de laterales

26
paper CO_FormayFuncióntxt251 - : Entre los rasgos específicos de la región GM, se observa un predominio de inventarios consonánticos pequeños: el 92 .1 % de las lenguas estudiadas posee entre 10 y 18 consonantes, 5 de las cuales (makuráp, karo y akuntsú -tupí-, lakondé y latundé -nambikwara-) confirman la predicción de Maddieson, según la cual este tipo de inventario se conforma a partir de articulaciones básicas. En concordancia con esta tendencia, el uso de 4-5 puntos de articulación entre las obstruyentes diferencia las lenguas de la región GM de las lenguas andinas y las lenguas chaqueñas, las cuales hacen uso de un mayor número de puntos de articulación para sus consonantes. Además, se observa un porcentaje significativo (52.5 %) de lenguas sin oclusivas sonoras y, entre las que poseen este tipo de segmentos, una tendencia a carecer de /g/. Si bien este es un rasgo extendido translingüísticamente, en la región GM contribuye a diferenciar las lenguas que se hablan allí de las lenguas chaqueñas y andinas.

27
paper CO_FormayFuncióntxt251 - : ^7El 47 % de las lenguas de la región AN posee inventarios consonánticos MP y el 37 % Pr (Gil Bustos, 2017): quechua boliviano (15 c ), quechua Cuzco (15 c), aymara (16 c), uchumataqu (17 c), jaqaru (20 c), quechua Cochabamba (21 c), chipaya (23 c). Estos valores no contabilizan las series de obstruyentes glotalizadas y aspiradas características de las lenguas de esta región.

28
paper CO_Lenguajetxt154 - : las aproximantes son sonidos que comparten rasgos consonánticos y vocálicos, esto es: hay obstrucción aunque menor que en las consonantes y por lo tanto más que en las vocales ; y existe armonicidad (estructura de formantes), pero de menor intensidad que en las vocales. (p. 138).

29
paper CO_Íkalatxt114 - : Alarcos (1950) clasifica los fonemas consonánticos del español en cinco series según sus propiedades distintivas: líquidas, nasales, sonoras, fricativas y oclusivas . Según este criterio, los fonemas /b/, /d/ y /g/ son oclusivos y tienen sus respetivos alófonos articulados sin oclusión en donde se produce una simple aproximación entre los órganos que entran en contacto durante su articulación. Dichos alófonos (fricativos para unos y aproximantes para otros) que aparecen especialmente en posición intervocálica se pierden sistemáticamente en el hablar de nuestros alumnos. De Granda (1985, p. 84) subraya la generalización a todas las posiciones de la articulación oclusiva de dichos fonemas en el español ecuatoguineano. Tanto la articulación como la percepción de cada uno de estos fonemas permanecen oclusivas y más tensas que las realizaciones españolas en todos los entornos fonotácticos, por interferencia de las lenguas maternas de nuestros alumnos. Es una característica de las lenguas ban

30
paper MX_ElAnuariodeLetrastxt10 - : El último tipo de modificación segmental se refiere a los casos de θ(ʧ, s(ʧ. De acuerdo con ^[136]Prince y Smolensky: “La jerarquía universal de margen dice que los segmentos menos sonoros funcionan como ataques más armónicos” ^[137]^13 (2004: 152). ^[138]Baertsch también comenta: “los segmentos de baja sonoridad (obstruyentes) son los segmentos preferidos en el ataque” ^[139]^14. (2012: 9). La siguiente [140]escala indica la sonoridad de cada uno de los segmentos consonánticos:

31
paper PE_Lexistxt10 - : En suma, la fonología proto-kawapana presenta rasgos considerados típicamente amazónicos o característicos de las tierras bajas, especialmente los proto-fonemas *ɨ y *ʔ; en consonancia con esto, los rasgos propios de las tierras altas están ausentes. Sin embargo, la fonología de una de las lenguas hijas, shiwilu, exhibe segmentos consonánticos que apuntan al contacto con lenguas de las tierras altas: las palatales /ɲ, ʎ/ y oclusivas y africada glotalizadas, aunque estas últimas operan a nivel fonético . Recuérdese que en el [32]cuadro 1 se indicó la tendencia de las lenguas amazónicas de contar con una sola consonante líquida, en tanto que el quechua y el aimara presentan tres, /l, ʎ, ɾ/. Con respecto a esto, shiwilu también se acerca a las lenguas centro-andinas pues posee cuatro consonantes líquidas, /l, ʎ, ɾ, ˀr/. Igualmente, hemos mencionado la presencia de /ɲ/ y /ʎ/ en otras lenguas de la zona intermedia, pertenecientes a diferentes familias lingüísticas. Nos referimos a

32
paper PE_Lexistxt88 - : En términos de filiación lingüística, el aimara forma parte de la familia lingüística aimara (Cerrón-Palomino 2000), la segunda más importante en el área andina. Los primeros estudios sobre la lengua fueron realizados por el jesuita italiano Ludovico Bertonio ([1612] 1984); luego, de él se han realizado estudios específicos sobre su fonología, sintaxis y morfología (Cerrón-Palomino 2000). Fonológicamente, se ha concluido que el sistema fonológico de la lengua consta de veintinueve segmentos: tres vocales y veintiséis consonantes. En cuanto a las vocales, la lengua presenta la vocal alta anterior /Ι/, la vocal alta posterior /ʊ/ y la vocal baja central /a/. En cuanto a las consonantes, la lengua presenta un inventario rico de fonemas consonánticos: /p/, /p^ ?/, /p^h/, /t/, /t^?/, /t^h/, /k/, /k^?/, /k^h/, /q/, /q^?/, /q^h/, /č/, /č^?/, /č^h/, /s/, /χ/, /h/, /m/, /n/, /ɲ/, /l/, /λ/, /ɾ/, /w/, /y/. En términos de su tipología sintáctica, se apunta que la lengua presenta un orden

33
paper PE_Lexistxt69 - : e exige necesariamente indicar su disponibilidad (que presupongo baja en el mejor de los casos), así como avanzar en su etimologización remitiendo a lenguas o grupos de lenguas africanas (bantú, kwa, etc.). Con todo, sería valioso un estudio en profundidad de la onomástica de la región, donde podrían aparecer más nombres de origen africano: así, por ejemplo, en la toponimia (aunque en este ámbito podrían haberse perdido algunos elementos tras la reforma agraria de 1968, que desembocó en una retoponimazión parcial a favor del quechua, evidente en nombres de localidades como Atahualpa, Huiracocha, etc.) y especialmente en la antroponimia. En este último ámbito, deben destacarse algunos apodos que, por la presencia de ciertos clusters consonánticos, pueden sonar a lenguas Níger-Congo: Nempo, Chango, Munda, Timbo, etc . (quepa aclarar que, en El Carmen y El Guayabo, es práctica generalizada el que sus vecinos, a menudo desde su infancia, tengan apodos, unos más afectivos que otros, incluyendo t

34
paper PE_Lexistxt113 - : El caso contrario es la creación de diptongos crecientes a partir de vocales simples (^[66]Marticorena 2010: 51-52), fenómeno que ocurre regularmente antecedido por sonidos consonánticos: la asimilación y el intercambio de la fricativa velar /x/ con la fricativa labiodental /f/ y viceversa, que en la forma oral se neutralizan en una fricativa bilabial sorda /ɸ/ .

35
paper PE_Lexistxt52 - : La adquisición de las oposiciones sigue más o menos un orden universal pero siempre aproximándose al sistema fonológico de la lengua que se está aprendiendo. En Preliminaries to Speech Analysis, Jakobson, Fant y Halle sostienen que los sistemas fonológicos o "patrones fonémicos" se organizan de acuerdo con una "escala dicotómica [que] la lengua superpone a la materia sonora" (1952: 12). Esta escala dicotómica determina las unidades fonológicas que usa cada lengua mediante rasgos distintivos binarios que establecen distinciones cada vez más específicas. Siguiendo esta misma línea de pensamiento, en Fundamentals of Language, Jakobson y Halle presentan de manera sintética la forma en que se organizan jerárquicamente los fonemas consonánticos del francés, los cuales "requieren solo cinco decisiones binarias: nasal/oral, y si es oral, entonces continuo/discontinuo y tenso/laxo ; compacto/difuso, y si es difuso, entonces grave/agudo. Cada consonante del francés contiene desde dos (compacto nasal)

36
paper UY_ALFALtxt225 - : Consonánticos: m=labial nasal ; p=labial oclusivo; n=alveolar nasal; t=alveolar oclusivo sordo; d=alveolar oclusivo sonoro; s=alveolar fricativo; l=alveolar lateral; sh=postalveolar fricativo sordo; Ʒ=postalveolar fricativo sonoro; ñ=palatal nasal; ch=palatal oclusivo; ll=palatal lateral; y=palatal aproximante; k=velar oclusivo sordo; g=velar oclusivo sonoro; w=velar aproximante; q=uvular oclusivo sordo; Ԍ=uvular oclusivo sonoro; ʔ=glotal oclusivo; h=glotal fricativo. Vocálicos: a=posterior abierto; e=anterior abierto; i=anterior cerrado; o=posterior cerrado.

37
paper UY_ALFALtxt237 - : En definitiva, no queda del todo claro si este modo de presentar el inventario está dado a los fines de lograr una descripción más simple del sistema o si se emplearon criterios fonéticos, puesto que, además, el autor usa alternativamente los términos cluster ‘grupo consonántico’ y complex sounds ‘sonidos complejos’. Por otro lado, afirma que estos sonidos complejos se reducen cuando ocurren en posición de coda, y que [h] y [ʔ] se pierden (op. cit.: 37), pero al mismo tiempo documenta el sonido glotal en posición de coda. Esto demostraría que se trata de segmentos, más que de grupos consonánticos, y es consistente con la restricción fonotáctica registrada en el resto de las variedades wichí/weenhayek y de las lenguas de la familia mataguaya: las eyectivas no ocurren en coda silábica .

38
paper VE_BoletindeLinguisticatxt96 - : Los discursos peninsulares formales tienen desviaciones estándares de los intervalos consonánticos que reflejan una producción de duración controlada: cada segmento respeta los gestos articulatorios necesarios para la producción y las influencias suprasegmentales . Por ello, la desviación es mucho mayor en las emisiones menos cuidadas, en las que se actualizan reducciones considerables de consonantes y elisiones de intervalos consonánticos. De manera similar, la informante de Tenerife también muestra una tendencia a la duración controlada y, por ello, mayor desviación estándar de la duración de los intervalos consonánticos.

39
paper VE_Letrastxt183 - : Este elemento vocálico parásito (como lo denomina Quilis 1999) es característico, más propiamente, de las vibrantes en posición de ataque en grupos consonánticos, donde este elemento aparece entre la consonante oclusiva (con la que /r/ forma el grupo consonántico) y la vibrante, por ejemplo: trabajo, cruz, brisa ; de hecho, la mayoría de los autores solo lo reportan en este contexto específico.

40
paper VE_Letrastxt146 - : 75). Igualmente tratado está el hecho de la simplificación de los grupos consonánticos como: gn (gnomo = nomo ), pn (pneumático = neumático) y los ya conocidos desde 1959.

Evaluando al candidato consonánticos:


1) lenguas: 31 (*)
2) fonemas: 17
4) segmentos: 14
6) consonantes: 11
8) inventario: 10 (*)
10) elemento: 9
11) oclusivo: 9
12) complejos: 9
16) vocales: 8 (*)
17) articulatoria: 8
18) vocálicos: 7 (*)
19) procesos: 7
20) sonidos: 7

consonánticos
Lengua: spa
Frec: 220
Docs: 77
Nombre propio: 1 / 220 = 0%
Coocurrencias con glosario: 4
Puntaje: 4.934 = (4 + (1+7.20945336562895) / (1+7.78790255939143)));
Candidato aceptado

Referencias bibliográficas encontradas sobre cada término

(Que existan referencias dedicadas a un término es también indicio de terminologicidad.)
consonánticos
: Diez-Itza, E., Martínez, V. (2004). Las etapas tardías de la adquisición fonológica: procesos de reducción de grupos consonánticos. Anuario de Psicología, 2(35), 177-202. Facultat de Psicologia Universitat de Barcelona.
: Figura 2 Inventarios consonánticos de LM (basado en ^[50]Maddieson, 2013a)
: Figura 3 Inventarios consonánticos de lenguas de AS (basado en ^[57]González, Gil Bustos & Castro Alaniz, 2013)
: Para el proto-kawapana, Valenzuela (2011a) postula la existencia de 16 proto-fonemas, 4 vocales y 12 consonantes. El sistema vocálico coincide básicamente con el de las lenguas contemporáneas: *i, *ɨ, *u, *a. El [31]Cuadro 6 presenta los proto-fonemas consonánticos.
: Vivar, P. (2009). Evaluación de grupos consonánticos de ataque complejo en un grupo de niños de la ciudad de Concepción con prueba articulatoria CEFI. Onomazéin, 20(2), 33-44.
: Wigdorsky, L. (1978). Realización de algunos fonemas consonánticos en el castellano de Santiago. Informe preliminar. RLA, 16, 53-60.